El dolor de espalda es una de las consultas más frecuentes en fisioterapia. La manera como la manifiestan suele variar de acuerdo con el estilo de vida de cada uno. Y, por lo tanto, también los posibles tratamientos. Saber identificar los motivos del problema es muy importante, sobre todo si nos limita en las actividades cotidianas.
Existen hábitos que mismo sabiendo que nos hacen daño seguimos haciéndolos, justamente porque son «hábitos». Pasemos a identificarlos:
1- Pasar demasiado tiempo sentados: mismo que el trabajo lo exija debemos levantarnos a cada 30 min. Esto favorecerá a la columna lumbar ya que soporta el 40% de nuestro peso cuando estamos en esta posición.
2- Mantener una mala postura: no solo tenemos que vigilar el tiempo que estamos sentados sino tb cómo lo hacemos es importante: apoyar la espalda en el respaldo y tener la cabeza recta.
3- Sedentarismo: A medida que nuestra actividad física se reduce, los músculos se debilitan y pasamos a estar expuestos a sufrir lesiones. Practicar una actividad física es una forma de prevenir problemas de salud tanto físico como mental.
4- La alimentación: escoja alimentos que aporten energía a tu cuerpo; evite tomar azúcar, grasas saturadas, alcohol, tabaco, etc.. Además, si no seguimos una alimentación saludable, corremos el riesgo de ganar esos kilos de más que pueden someter a nuestra columna a una presión extra para la que no necesariamente está preparada, así como favorecer la aparición de la osteoporosis.
5- Cargar o levantar pesos: Si tenemos que agacharnos para cargar un objeto, lo mejor es flexionar las rodillas al invés de doblar la espalda, un movimiento en el que arriesgamos la salud de nuestras vértebras. Igualmente, cargar con pesos excesivos, por ejemplo en bolsas, puede acabar pasándonos factura. Para evitar desequilibrios, es aconsejable alternar esa carga de un hombro a otro.
6- Es estrés: el mayor enemigo de la espalda; La tensión a la que puede someter a los músculos es capaz de generar contracturas y otros problemas que se pueden reflejar en diferentes dolores en la espalda y resto del cuerpo.
7- El colchón: resulta clave dormir en un colchón en perfectas condiciones. En general, se recomienda que nunca lleguen a los 10 años, aunque cuanto más frecuente sea el cambio, tanto más lo agradecerá nuestra espalda.
Si con todas estas pautas sigues con dolor lumbar, lo mejor es consultar con tu fisioterapeuta para que te devuelva tu bienestar y tu energía.
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